ORFIS TAMBIÉN ROBA, ES EL ORGANISMO LADRÓN QUE ROBA AL LADRÓN
Por Edgar Hernández*
@LineaCaliente
Tanto que le hace al cuento su titular Delia González Cobos presumiendo transparencia, honestidad y de ser centinela de los funcionarios de gobierno y ediles y exgobernadores corruptos para que resultara peor.
La Auditoría Superior de la Federación, ASF, que no depende del gobierno del estado, detectó “pagos extraordinarios por más de 100 millones de pesos en ORFIS”
¿El concepto?
Gastos en servicios personales y pagos extraordinarios superiores a 100 millones tan solo en 2023.
Son 100 millones de pesos que le alcanzan hasta para comprarse un camello.
Luego de revisar la cuenta pública del 2023 -aún falta saber que pasó cinco años atrás-, la (ASF) observó que ORFIS, organismo responsable de auditar a las dependencias y municipios, pagó a los suyos gratificaciones por un monto superior a lo que establece la ley.
¿Fue en agradecimiento a su complicidad?
Su titular, quien en días pasados acusó a los diputados y periodistas de tergiversar el tema de las 200 empresas fantasma del gobierno del atarantado que arrojan faltantes por 5 mil 500 mil millones de pesos se quedó muda luego de trascender la noticia.
Esta mujer que desde 2019 está al frente de ORFIS como Auditora General –“y no me van a mover”- le apuesta al olvido.
Desdeña el informe de resultados que presentó el pasado fin de semana la ASF en donde se da fe pública que del presupuesto que se le asigna más de 83 por ciento se destina al pago de nómina.
ORFIS es la élite de la burocracia, es la dependencia que no rinde cuentas a nadie y se despacha con la cuchara grande.
Sin embargo, el crimen paga.
Imposible esconder la auditoria de la ASF a ORFIS. Imposible borrar las evidencias del verdadero vigilante de los recursos públicos.
José Manuel del Río Virgen desde el Congreso de la Unión como Auditor Superior de la Cámara de Diputados, responsable del manejo y vigilancia de los dineros públicos no se la va a perdonar.
No va a pasar por alto las pillerías y atropellos registrados en el mandato del atarantado mismas que al propio Del Río Virgen lo llevaron a la cárcel acusado de un asesinato que nunca cometió y así lo comprobó.
Y no es un tema de venganza personal.
Es cuestión de honestidad y de no pasar por alto las raterías que, una a una, van saliendo; es el excremento de morena que sale a flote del cual tampoco Rocío Nahle será cómplice.
Delia González Cobos, la tapadera de Cuitláhuac, tendrá que rendir cuentas y explicar el por qué del sospechoso manejo de las participaciones federales, por qué pagó montos mayores a los establecidos a la ley a sus colaboradores.
Son 162 millones de pesos correspondientes al capítulo 1000 de “Servicios Personales” de los cuales la ASF auditó 137 millones de pesos, que se pagaron por nóminas ordinarias, extraordinarias y de compensaciones por su “extraordinario trabajo”.
ORFIS efectuó pagos a 452 trabajadores de confianza y eventuales con 83 categorías, de los cuales se “verificó” que los trabajadores se ajustaron a las categorías permitidas y se localizaron en la plantilla de personal autorizada.
Ser juez y parte no representa problema para quien “verifica”.
Hoy el tema de la corrupción de ORFIS tiene varias aristas ya que el SAT también detectó aviadores. La auditoría arrojó pagos a trabajadores después de su fecha de baja definitiva por cientos de miles de pesos.
Orfis es el moderno Lutero de los cacalovers.
Tiempo al tiempo.
*Premio Nacional de Periodismo